MONTCALM (3.077 mts)
| "Disfruto alcanzando la cima, me gusta esa sensación de satisfacción que no siento en ningún otro lugar. Pero, sobre todo, me gusta ver las cimas que todavía me quedan por coronar" WILLIE BENEGAS (ALPINISTA) |
La Pica d’Estats con sus 3.143 metros de altura no es únicamente la montaña más alta de Catalunya sino que también representa uno de los símbolos más importante de la identidad de los catalanes. Enclavada en la frontera con Francia, el acceso a su cumbre puede realizarse por diferentes rutas tanto por la vertiente catalana desde el sur como por la francesa en el norte. Posiblemente la más concurrida sea la que asciende por la catalana a través de Vallferrera y por el Port de Sotllo pero la vía de la vertiente norte que pasa por el refugio de Pinet, en la zona del Ariège, es seguramente la más impresionante y grandiosa al tener uno de los desniveles más importantes de todo el Pirineo. Casi 2.000 metros verticales separan el aparcamiento del Artigue de la cumbre de la Pica d’Estats.
Ésta es la ruta escogida por La Compañía de La P.E. para realizar la última aventura de El Reto de… LAS 4 ASCENSIONES IBÉRICAS aunque en esta ocasión el reto en el que se enfrascarán Ana, Chema y Jose será un poco más ambicioso de lo habitual. La zona donde está la Pica d’Estats tiene otras cinco montañas de más de 3.000 metros de altura: Pic de Sotllo (3.072 mts), Pic Verdaguer (3.131 mts), Montcalm (3.077 mts), Punta Gabarró (3.115 mts) y Pic Rodó de Canalbona (3.004 mts), y la intención de La Compañía es coronar el mayor número posible de estas cimas. Es un desafío diferente pero asumible para todos pese a que alguna de estas montañas tenga un nivel de dificultad algo superior. Que comience la aventura...
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VIERNES, 9 DE JULIO DE 2010
Después de unas cuantas horas de viaje en furgo llegamos a nuestro destino situado en la región del Ariège, al sur de Francia. Son las 13:45 de la tarde cuando comenzamos a caminar desde el parking del Artigue (1.140 mts) con un calor sofocante. Junto a un cartel que indica la dirección del refugio de Pinet arranca un amplio camino que se adentra en un frondoso y espeso bosque siguiendo las marcas de GR y paralelos al río Artigue en dirección SO.
Al llegar al cartel que indica la dirección de la Cascada de Artigue el sendero gira hacia la izquierda en dirección E alejándose cada vez más del río y ganando una considerable inclinación a través de grandes zigazagas entre los árboles.
El camino es ancho y está muy bien marcado cosa que ayuda en la ascensión pese al duro desnivel. Hace mucho calor y la humedad es muy alta lo que notamos en nuestros cuerpos empapados en sudor.
El impresionante hayedo que estamos cruzando es conocido como el Bois de Fontanal y nos acompaña en nuestra ruta durante un buen trecho.
Finalmente, en poco más de 1h15’ superamos la zona boscosa para salir al Pla de Nouzère (1.630 mts). La ascensión se suaviza ligeramente en un largo flanqueo que va en dirección SO por amplías vaguadas y extensas laderas de un color verde intenso.
A nuestra derecha dejamos la carena formada por el Picou de l’Estela, el Pointe de Montestaure y el Pic de Montestaure.
Cruzamos un pequeño torrente que baja del Étang Sourd. Sus frías aguas nos permiten refrescarnos antes de continuar con la ascensión.
Junto a un solitario pino el camino se bifurca en dos posibles alternativas para alcanzar el refugio, Nosotros escogemos el sendero de la derecha que es mucho más directo enfilando pendientes de hierba y roca.
Esta variante que continua en dirección SO no siempre es cómoda pero una mirada hacia el valle que hemos dejado atrás…
…o hacia delante para contemplar el paisaje de las montañas que tenemos ante nosotros permite olvidar cualquier dificultad.
Los últimos metros antes de llegar al refugio nos dan una pequeña tregua al suavizarse ligeramente el desnivel. El calor es bastante agobiante pese a estar a 2.000 metros de altura y ya tenemos ganas de llegar para poder refrescarnos con una cervecita.
En apenas 3h llegamos al refugio de Pinet donde pasaremos la noche después de ascender algo más de 1.000 metros. Está situado sobre un montículo a los pies del pequeño Étang du Pinet, y protegido por el Guins dels Talps (2.779 mts) al SO y el Point d’Escassa (2.476 mts) al SE cuya impresionante y vertical cara norte se levanta majestuosa ante nosotros.
Nos encontramos aproximadamente a la mitad de la ascensión y todavía nos faltan otros 1.000 metros más de desnivel hasta la cumbre de la Pica d’Estats. La espumosa rubia y fría cerveza a esta altura sabe especialmente deliciosa… Ahora una ducha caliente y a cenar antes de irnos a dormir.
SÁBADO, 10 DE JULIO DE 2010
Son las 7:15 de la mañana cuando retomamos la marcha hacia la cima en un día espectacular y radiante. Seguro que hoy volverá a hacer mucho calor así que no podemos perder ni un minuto más. ¡¡Adelante!!
Al pie de las escaleras del refugio sale el camino que por la derecha del Étang du Pinet y a través de una pequeña hondonada remonta en dirección S una loma de hierba y rocas hasta su parte superior.
Desde lo más alto, una mirada atrás nos permite observar el estratégico enclave donde se encuentra el refugio justo en el momento que el sol despunta por encima de él.
Un mar de nubes cubre por completo el valle y el Bois de Fontanal por donde ayer ascendimos.
La senda perfectamente señalizada pierde algo de altura para entrar en el cauce de la agosta Valleta de Barz que protegida a la derecha por la arista que forman el Guins dels Talps (2.779 mts) y el Guins de l’Ase (2.959 mts) llega hasta el Pic de Sotllo.
La Compañía de La P.E. continua la ascensión hacia el S flanqueando el barranco por la ribera oriental y por un camino bastante fácil hasta el Étang d’Estats.
Encontramos un par de grandes neveros perennes con nieve todo el año que cruzamos con mucha precaución puesto que no llevamos crampones.
Afortunadamente el continuo paso de montañeros ha abierto una buena traza que permite pasar sin necesidad de calzarse los crampones.
El sendero de ascenso está perfectamente señalizado y marcado con hitos aunque en algunos momentos la gran cantidad de piedras que encontramos y el desnivel lo hacen un poco más duro.
La ruta no llega hasta el mismo Étang d’Estats situado a 2.415 metros de altura puesto que el camino queda unos 25 metros por encima pero la vista que se tiene de él y de su entorno es espectacular. A mediados de julio el lago todavía permanece medio congelado cosa que demuestra lo sombrío que resulta el barranco, y en general toda la vertiente norte de esta gran montaña.
En este impresionante mirador el camino gira a la izquierda hacia el SE separándose cada vez más del barranco en busca del Étang du Montcalm. La cara norte del Montcalm (3.077 mts) ya se deja ver delante de nosotros.
Sin ningún tipo de dificultad pero en fuerte subida remontamos la pedregosa barrancada con algunos pequeños neveros que nos llevará al siguiente lago. Al fondo tenemos el Pointe de Montcalm con sus casi 3.000 metros de altura.
El Étang du Montcalm (2.557 mts), a los pies del Pointe de Montcalm, no es muy grande y se encuentra casi congelado por completo. Después de 1h10’ caminando hacemos un pequeño alto en el camino para hidratarnos antes de comenzar a remontar la empinada cara norte del Montcalm. Siguiendo los hitos y marcas de pintura, el camino bordea el lago por la derecha y sube en dirección S por unos inclinados canchales de granito cosa que nos permite ganar altura rápidamente.
Cuando salimos de uno de estos canchales nos volvemos a encontrar con otro gran nevero que hay que cruzar. Destaca la gran cantidad que se conservan este verano gracias a las grandes nevadas que ha habido durante el invierno y principio de primavera. Pese a la inclinación que tiene éste, no dejan de pasar montañeros que ayudan a mantener abierta la traza permitiéndonos no tener que utilizar los crampones.
La nieve está bastante dura y helada cosa que provoca algún que otro resbalón sin mayor importancia aunque…
…nada detiene a La Compañía de La P.E. en su avance hacia la cima… ¡¡¡JJJUUUUAAAAAAAAAA!!!
Hoy es un buen día para hacer montaña. Podemos ver perfectamente el valle por el que estamos ascendiendo.
Pese a que la ruta en general sigue un camino muy bien marcado y fácil de seguir, en algunos momentos tenemos que hacer pequeñas trepadas sin apenas dificultad. Resulta muy divertido ascender de esta forma.
Llegamos a una zona aproximadamente a 2.750 metros de altura donde el terreno se suaviza ligeramente. O por lo menos parece más fácil continuar ascendiendo pese a estar cubierto de un sinfín de neveros.
El Montcalm y toda su larga arista vista desde la cara norte se va acercando por momentos cada vez más. Cruzando un nevero tras otro vamos buscando el mejor camino para continuar ascendiendo en busca de la ansiada cumbre de la Pica d’Estats.
¡¡¡La Compañía de La P.E. dispuesta a conquistar todos los tresmiles que pueda en esta jornada!!!
Poco a poco ganamos metros de altura a base de ir subiendo por la ladera de la montaña un resalte tras otro. Detrás de nosotros la arista del Pointe de Montcalm queda casi a nuestra misma altura.
De nuevo, un tramo pedregoso con fuerte inclinación nos permitirá ganar metros rápidamente.
Hace aproximadamente 2h que salimos del refugio y aunque no estamos cansados ya tenemos ganas de alcanzar la cima. Estos tramos tan inclinados resultan muy rompe piernas.
Paso a paso, sin prisa pero sin pausa, vamos en busca de un nuevo resalte que suavice el desnivel y nos facilite el esfuerzo en la ascensión.
Al final de este largo nevero llegaremos a la cota de los 2.900 metros de altura.
En este punto el itinerario de la vertiente N que estamos siguiendo enlaza con la ruta clásica de la vertiente S que viene del Port de Sotllo, a pies del Port de Sotllo (3.072 mts). En un verano normal sin restos de tanta nieve este tramo sería un camino bien marcado y señalizado que llevaría hasta la canal rocosa que une por la derecha el Port de Sotllo con el Coll de Riufred a la izquierda. Son las 10:15 de la mañana y tenemos la impresión de que es un poco tarde para lanzarnos a la conquista de todos los tresmiles que queríamos coronar. Así pues renunciamos al Pic de Sotllo que queda un poco alejado de la ruta que llega hasta la Pica d’Estats.
La nieve acumulada este año ha formado una pequeña arista de aproximadamente 50 metros de largo que debemos seguir hacia la izquierda para ir a buscar la base del Coll de Riufred. Al llegar a ese punto tendremos dos posibles variantes para continuar ascendiendo. La primera sigue el camino en zigzag por un terreno rocoso e inestable pero bien señalizado en dirección SE hacia el Coll de Riufred (2.978 mts). Desde allí la ruta sigue hacia la derecha por la carena del collado que conduce hasta la base de la Pica d’Estats. La segunda ruta más corta y directa consisitiría en pasar hacia la derecha en dirección S entre los bloques de granito del barranco siguiendo los hitos de piedra y las señales de pintura amarilla. En un clara diagonal por debajo de la carena del collado se llegaría hasta el punto donde ambas rutas coinciden ya a más de 3.000 metros de altura.
Nosotros escogeremos la segunda opción hacia la derecha mucho más directa y rápida.
El problema está en que la nieve lo tapa prácticamente todo sin dejar rastro alguno de hitos ni señales. Pese a no tener crampones y lo inclinado del terreno, existen marcas de pisadas de otros montañeros que facilitan la ascensión.
Cruzar el nevero no resulta fácil pero tras algún que otro resbalón sin ninguna consecuencia salimos a una zona de grandes piedras que nos conducirá a la base de la pirámide final.
La fuerte inclinación de este tramo pone a prueba nuestra resistencia pero nosotros siempre vamos hacia arriba.
Al alcanzar la carena podemos apreciar claramente el camino que sube por la pedregosa ladera en cortos zigzags hasta la brecha que separa la Pica d’Estats del Pic Verdaguer. Nuestra intención una vez que hemos renunciado al Pic de Sotllo es subir primero al Pic Verdaguer de camino hacia la Pica d’Estats. Una vez conquistada la cima más alta de Catalunya intentaremos seguir por la cresta en dirección E para coronar la Punta Gabarró y el Pic Rodó de Canalbona. De regreso otra vez a la cima de la Pica por la misma cresta iniciaremos el descenso hacia el Coll de Riufred para ir a coronar el Montcalm. Pese a dejar de lado el Pic de Sotllo no deja de ser también un plan muy ambicioso.
El sendero discurre entre un mar de rocas junto a un enorme nevero que algunos montañeros que ya están descendiendo de la cumbre deciden bajar deslizándose como si se estuvieran lanzando en trineo.
Nosotros continuamos por la vía directa para ganar algo de tiempo y llegar antes. Ya despunta el Pic Verdaguer a nuestra derecha.
En pocos minutos alcanzamos los 3.100 metros de altura que tiene el pequeño collado. Sólo nos queda un último pequeño esfuerzo para coronar el primer tresmil del día.
Giramos a la derecha para encarar los últimos metros que llevan a la cima en un fácil ascenso.
A las 10:45 de la mañana, La Compañía de La P.E. llega a la cumbre del Pic Verdaguer (3.131 mts) después de casi 3h30’ de ascensión desde el refugio de Pinet.
Ahora toca deshacer el camino hasta el collado para ir a buscar la siguiente cima.
En la brecha reanudamos la ascensión con una pequeña trepada sin ninguna dificultad…
… buscando el mejor paso posible entre las rocas hasta llegar al punto culminante de toda Catalunya.
¡¡¡¡¡JJUUUUUUAAAAAAAAAAAA!!!!!. Poco antes de las 11:30 de la mañana, La P.E. consigue su gran objetivo: coronar la alargada y estrecha cumbre de la Pica d’Estats (3.143 mts). ¡¡¡La Compañía de La P.E. está en el Cim de Catalunya!!! ¡¡El Reto de LAS 4 ASCENSIONES IBÉRICAS está completado!! A demás de esto, en pocos minutos hemos sumado nuestro segundo tresmil de la jornada. Aunque todavía quedan tres cumbres más por hollar, la alegría por la hazaña se nota en nuestras caras.
Es un buen día para disfrutar de las espectaculares vistas que tenemos desde este lugar. El resto de tresmiles que habíamos venido a subir están todos a tocar de la mano. En dirección O-NO, el Pic Verdaguer (3.131 mts) y el Pic de Sotllo (3.072 mts), con cimas como el Certascán y el Mont-roig de fondo. Hacia el N-NE el Montcalm (3.077 mts). Un poco más a la derecha, por el SE, la Punta Gabarró (3.115 mts), el Pic Rodó de Canalbona (3.004 mts) y las cimas andorranas del Pic de l’Estanyó, el Medacorba y el Comapedrosa.
Justo por detrás de nosotros, en dirección S, queda el Estany d’Estats, el Estany de Sotllo, la ruta de la vertiente catalana que viene de Vallferrera, y por detrás el Monteixo. Es una panorámica que no tiene fin.
Realizamos un intento para coronar la Punta Gabarró y el Pic Rodó de Canalbona siguiendo la larga cresta en dirección SE. Aunque los primeros metros no presentan ninguna dificultad el destrepe por la arista en seguida se complica y nos surgen dudas sobre los pasos a seguir. Se trata de descender un incómodo y estrecho resalte muy aéreo de IIIº pero después de varios intentos para superarlo no terminamos de verlo claro. Así pues decidimos no arriesgarnos y volver a la cumbre de la Pica para dirigirnos a la última de las cimas previstas para la jornada: el Montcalm. Ya volveremos en otra ocasión por estas cimas que no hemos podido conquistar. El camino que nos debe llevar al último tresmil sigue la misma ruta hacia el NE utilizada en la subida para ir a buscar el Coll de Riufred (2.978 mts).
El descenso se hace rápidamente y sin ninguna dificultad.
A medio camino y una veintena de metros por encima del sendero principal se encuentra la cumbre del Cap de la Coume de Riufred (3.042 mts). Es uno de esos tresmiles en discusión sobre si merece estar catalogado dentro de la lista oficial que existe.
Al margen de cualquier controversia, La Compañía de La P.E. decide coronarlo pese a no estar previsto inicialmente. El mal sabor de boca que nos ha quedado después de no poder hollar todos los tresmiles que queríamos nos hace ir a buscar esta “mini cima” representada por un enorme hito de piedras apiladas.
El camino no tiene ninguna dificultad así que un pie detrás de otro nos dirigimos hacia nuestro siguiente objetivo.
Hacia las 12:00 del mediodía llegamos al Coll de Riufred (2.978 mts). Un vistazo a la derecha nos muestra la estrecha canal que culmina otra de las rutas que permite coronar la Pica d’Estats. En este caso la que viene del parking del Étang de Solcén.
Desde el collado continuamos en dirección N ascendiendo en zigzag por un tramo muy empinado de la ladera sin ninguna dificultad puesto que el camino está muy bien marcado.
Durante el ascenso nos cruzamos con un grupo de americanas con el que compartimos el refugio la noche pasada. Están descendiendo del Montcalm con una amplia sonrisa en sus caras y nuestra sorpresa es mayúscula al comprobar que a 3.000 metros de altura todas van con sandalias. Ninguna lleva calzado de montaña y teniendo en cuenta la cantidad de neveros que hay que cruzar para llegar hasta aquí no sería de extrañar que alguna de ellas acabara con problemas de congelaciones o de caída por resbalón. Nosotros continuamos a lo nuestro porque ya estamos muy cerca del final de nuestra aventura.
La ruta nos da un pequeño respiro al suavizarse el desnivel antes de alcanzar la antecima de esta redondeada montaña.
Los últimos metros verticales tocan a su fin…
Tras ascender la parte más inclinada llegamos a una zona mucho más plana que gira hacia el O siguiendo la larga y suave loma hasta la cima.
Son las 12:30 del mediodía y La Compañía de La P.E. acaba de hollar su tercer y último tresmil. Se trata de una montaña situada íntegramente en Francia y su cima es completamente diferente al resto de tresmiles que hay en la zona ya que es mucho más plana y amplia.
Sí tiene en común las impresionantes vistas, muy especialmente del resto de tresmiles. Desde el Pic Rodó de Canalbona hata el Pic de Sotllo pasando por la Punta Gabarró, la Pica d’Estats y el Pic Verdaguer. Esa preciosa arista será otra de las aventuras en la que nos enfrascaremos muy pronto…
Nos merecemos un pequeño descanso en la cima disfrutando de las panorámicas. Mires hacia donde mires, la vista se pierde en el horizonte de nuestros queridos Pirineos.
Da la impresión de que todas las montañas están a un salto, ¿verdad? Pero en realidad no es tan fácil como parece.. jejejejeje…
Llevamos más de 5h caminando y pese a no haber podido alcanzar todas las cimas que nos habíamos propuesto al principio de la ascensión estamos muy contentos y satisfechos de haber conseguido la última cumbre que nos faltaba para completar El Reto de… Las 4 Ascensiones Ibéricas. Queda el descenso, primero hasta el refugio de Pinet donde volveremos a pasar la noche y mañana a primera hora hasta el parking del Artigue. Sólo entonces habrá finalizado realmente la aventura...
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